15/01/2016

¿PARIS?


           

 

      No

      No estuve contigo en París,

      tus pisadas y las mías no humillaron sus calles,

      tu pecho no acunó al mío,

      ni oí tus latido,

      pero si tu voz bronca y suave , que pintaba imágenes

      de amor en las piedras .

      No sé definirte,

      en realidad no te conozco y nunca he llegado a descubrir

      la verdad que proclama tu poesía.

      Creo que ambos fracasamos,

      Yo, por creerme musa mística en tu vida,

      lluvia de amor y palabra al abrazarte,

      sin saber que emprendía un viaje equivocado,

      de tierra a cielo…….

      fuiste caricia y espada,

      Paraíso y desierto,

      Palabra y silencio,

      Agua y fruta prohibida,

     ¿Qué reclamo?

      Nada.

      La memoria del agua no existe,

      Y la frontera que separa tu alma y la mía

      son como los límites que impone el sol,

      fronteras entre los océanos y la tierra

      que separan por siempre nuestros cuerpos.

 

      C, Parra