
Te amé…¡Dios como te amé!
Todo comenzó en otoño
¿recuerdas?
me abrazabas con manos jadeantes
mientras me prometías amor eterno
al rodear mi cintura temblando
ofreciéndome un cesto de fresas
y rojos duraznos
me hablabas de un baño en el cielo,
cuando yo levantaba mis volantes
para chapotear descalza en el lago
¡que fácil fue amarte….! y
Que dolor ahora contemplar
como deshojas la flor
clavando hasta sangrar
sus espinas en mi costado
Ha llegado la primavera…
Llegó y todo ha terminado
Stella
DEerechos reservados
Del poemario Gris sobre Gris
No hay comentarios:
Publicar un comentario