No, no
no llevaba calcetines
cuando ayer pisaba charcos, y
disfrutaba chapoteando en ellos
gozando sus salpicones,
tampoco quería abrir el paraguas,
Me gustaba sentirla caer sobre mi espalda
mirar al cielo, ver las nubes
la espantada de las aves
buscando refugio en los árboles
El silencio de su roto canto
silencio igual al mío
--interrogándome--
Asoma a mis recuerdos aquel músico callejero
que tocó, solo para nosotros
música bailable, un bolero creo
melodiosa voz que llenó mi alma de sueños
hoy sigo deletreando tu nombre, que
a pesar de tantos años, no se ha borrado
Tampoco el temblor de tus manos
cuando eras caricia en mi piel
C, Parra
Honrar la memoria con los mejores recuerdos es algo hermoso, tanto para nosotras como para quien ya no está cercano. Es un precioso poema amiga, te mando un beso.
ResponderEliminarP A T Y
Olá, querida amiga Stella!
ResponderEliminar"Buscando refugio en los árboles".
Amo a natureza e ela nos acaricia o espírito de forma plena.
Tenha dias abençoados!
Beijinhos fraternais
Caricias que todavía son, melancolía que aún te visita, ayer que siempre...
ResponderEliminarAbrazo hasta vos.
Algo que no debemos perder es el contacto con la naturaleza como nos narras en esta bonita poesía. Algo que creo todos realizamos en nuestra niñez es pisar el mayor numero de charcos en especial cuando nos compraban unas botas nuevas.
ResponderEliminarTampoco es fácil olvidar el primer baile o escarceo amoroso con ese primer amor.
Saludos.
Hay recuerdos imborrables. Un beso
ResponderEliminarNon ho mai camminato scalza, sotto la pioggia, in mezzo alle pozzanghere.
ResponderEliminarDeve essere qualcosa di impareggiabile
Hola Carmen, acariciante y sereno volcado del pasado que tanta dicha encerraba en cada paso dado, a la vera de ese ser que despertaba la dormida dicha que nos tocaba…buen fin de semana.
ResponderEliminarUn abrazo